Introducción
Una de nuestras compañeras, Blanca Fernández Tejada, ha escrito un libro sobre su pueblo, Torre de Cameros, en el que narra sus recuerdos con la idea, según sus palabras de “poder transmitir a los pequeños de la familia mis vivencias y darles la oportunidad de conocer los cambios que se han producido en nuestra sociedad”. Hemos creído interesante hacerle una entrevista para el blog de ADEX y aquí la tenéis.
Así es. En un principio no tenía pensado escribir ningún libro. Simplemente lo tomé como un trabajo para el profesor de Historia Contemporánea, D. José Luis Gómez Urdáñez, al igual que otras veces lo he hecho en clase, como trabajo individual o de grupo junto a otros compañeros.
¿Le entregaste al profesor el trabajo?
Sí. Un día que nos dio una conferencia, de las muchas a las que nos tenía acostumbrados, me acerqué cuando terminó y le dije que había hecho los deberes, convertidos en un libro.
Habían pasado más de tres años y no hizo falta recordarle nada. Con una sonrisa enorme, me dijo que se lo enviara. Le pedí que me escribiera el prólogo y aceptó gustoso.
Todos conocemos el desarrollo que han tenido los acontecimientos. Nos hemos quedado sin su participación, que a buen seguro, hubiera sido maravillosa. Mi libro no tiene prólogo. El comienzo del libro es solo eso: el comienzo y el motivo por el cual lo escribí.
¿Cómo te inspiras para escribir?
Al estar la pandemia de Covid-19 de por medio, tuve tiempo suficiente de investigar la historia de mi pueblo en el Archivo Histórico y otras instituciones y a lo que fui encontrando, añadí los recuerdos de una niña de pueblo, para poder transmitir a los pequeños de la familia mis vivencias y darles la oportunidad de conocer los cambios que se han producido en nuestra sociedad. Para ello, he sacado de paseo mi vena pedagógica, intentando utilizar dentro de un lenguaje sencillo, cuando el caso lo requería, el vocabulario propio de nuestra región.
¿Cuál de los valores que intentas transmitir te parece el más importante?
El valor del trabajo, del sacrificio, de la cultura y de la familia. No sé si lo habré conseguido.
He visto trabajar muy duro a las gentes de la Sierra Camerana en general, sacrificarse por lo que realmente merecía la pena, valorar que hubiera escuelas y buenos maestros para instruir a los niños y como he tenido la suerte de pertenecer a una familia muy unida y muy grande, me gustaría que siguiéramos así.
¿Qué te ha aportado este trabajo?
Muchas cosas. En primer lugar conocer la historia tan rica de Torre. Parece mentira que en un pueblo tan pequeño hayan pasado tantas cosas interesantes.
En segundo lugar, renovar y estrechar los lazos de amistad y cariño entre la gente del pueblo, volver a saber de ellos, pero sobre todo, con los familiares mayores que se ven reflejados en él y en muchos casos son los protagonistas de historias de las que sienten orgullosos.
En tercer lugar, gran satisfacción y agradecimiento a todos por la buena acogida, después de los avatares de maquetación, impresión, etc.
Después de esta aventura, invito a mis compañeros de la Universidad de la Experiencia para que se animen, porque seguro que ellos tienen un pueblo maravilloso, cuya historia merece ser investigada y publicada desde sus vivencias personales.
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