Amigos lectores, os comunicamos que el próximo club de lectura de ADEX se realizará el día 28 de octubre a las 19:00 horas en el lugar de siempre, el Espacio Cultural de la Librería Santos Ochoa de la calle Doctores Castroviejo.
El libro, elegido entre todos los participantes en la sesión anterior, que vamos a leer en esta ocasión es: "Así empieza lo malo", de Javier Marías, escritor, traductor y editor español (Madrid, 20 de septiembre de 1951) y miembro de la Real Academia Española, donde ocupa el sillón "R".
Es su novela más erótica y feminista, con más humor y desparpajo lingüístico, y la segunda más larga tras su trilogía "Tu rostro mañana". En sus páginas está el rastro del joven que fue Marías (llamado aquí Juan), que desde una edad cercana a los 50 años evoca su vida en 1980. Tenía entonces 23 años, el adiós al franquismo aún estaba presente, la Transición había comenzado a andar, y el divorcio estaba al caer. Ahí está el origen de una novela en cuyo título, una vez más, está la presencia tutelar de Shakespeare, ahora invocado en Hamlet: "Así empieza lo malo y lo peor queda atrás".
- No es una novela sobre los jóvenes y la sexualidad, pero... tiene coordenadas sobre este territorio y la manera en que algunos jóvenes buscan crear recuerdos y sembrar felicidades.
- No es una novela autobiográfica, pero... en ella Marías desanda sus años juveniles.
- No es una novela de amor, pero... se asoma a diferentes formas de amor.
- No es una novela sobre venganza, pero... en ella palpita ese lado incontrolable del ser humano, junto al de la impunidad y las sombras de la justicia.
- No es una novela política ni histórica, pero... la estela del franquismo es larga, y el autor no se calla.
- No es una novela ni filosófica ni sociológica, pero... Marías abunda en el tema y se pregunta qué haría la gente: ¿saber o no saber algo personal o ajeno?
Él, que ha escrito 12 novelas, ha sido traducido a 29 idiomas y ganado varios premios, y que se sabe hijo del azar porque su bisabuelo materno estuvo a punto de morir cuando era un bebé, mientras décadas después su padre fue casi empujado a la muerte durante el franquismo tras la infamia de un delator, deja su universo literario en esta novela, donde los protagonistas se miran en silencio y dicen: "Y no, nada de palabras".
Texto: Blanca Alfaro sobre un artículo de W. Manrique en El Cultural de El Pais.
Enlace con el cartel del Club del Lectura confeccionado por José A. González
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