Ayer viernes,
nuestra excursión mensual nos llevó a la provincia de Guipúzcoa. Nuestros
destinos, Oñate, el monasterio de Aránzazu y Guetaria, un viaje que empezó con
la algarabía habitual pero aderezada con
un ligero pesimismo por el tiempo que podríamos encontrarnos ya que los
pronósticos eran de lluvia, frío y nieve. Como siempre, la
primera parada a la salida de Vitoria para nuestro almuerzo, variado y
abundante puesto que Juan nos obsequió con un vino propio riquísimo y un buen
chorizo, Merche Villar también llevó del suyo y otros compañeros contribuyeron
con otras cosas ricas. Por otro lado, la parte dulce consistió en los ricos
mini-canutillos y el moscatel de Adex, que lo mismo que el vinillo nos calentó
el estómago y nos elevó el espíritu.
La lluvia iba y
venía, algunos chaparrones eran bastante fuertes pero he de decir que en general tuvimos suerte, porque los más gordos ocurrieron dentro de edificios o en el autobús. Oñate, desconocido
para la mayoría, deslumbró. Yo hacía tiempo que no lo visitaba pero lo encontré
igual de bonito que siempre. La primera visita a la Universidad, magnífico
edificio plateresco renacentista que desde mediados del siglo XVI hasta principios del siglo XX funcionó como la primera y única universidad del País Vasco. Fue fundada por el obispo oñatiarra Don Rodrigo Sáez de Mercado de Zuazola en 1540 bajo el nombre de Universidad del Sancti
Spiritu y las especialidades que impartía eran Teología, Leyes, Artes y Medicina. Tras varios destinos y patrocinadores la institución cerró sus puertas en 1901. En la actualidad, desde 1989, el edificio acoge el Instituto Internacional de Socialogía Jurídica.
De ahí, a la iglesia de San Miguel, patrono de la ciudad, templo de estilo principalmente gótico. Su retablo renacentista de la Piedad está considerado como de los mejores del País Vasco y tiene adosado un curioso claustro por cuyo patio interior pasa el río ya que a la primera nave original se le añadieron otras dos construyéndolas sobre un puente ya existente. Su altar mayor, al que se accede por una escalinata, es el más elevado de la provincia ya que debajo se encuentra la cripta del conde de Guevara, Señor de Oñate durante largos años.
Texto: Julia Baigorri
Fotografías: Julia Baigorri y Francisco Moral Portillo
Buen comentario y rápido, sois unas artistas.La verdad es que para ser enero pasamos un día estupendo sin demasiado frio ni lluvia. Gracias chicas y fotógrafo por vuestro eficaz trabajo.
ResponderEliminar