VIAJE A SICILIA. MÓDULO III

Con motivo de la finalización del tercer módulo, algunos de los alumnos marchamos el 30 de mayo de "viaje de estudios" a realizar un recorrido por Sicilia. 

El fin principal era "liberarnos del estrés" acumulado durante estos tres años, y de paso aprender algo de su cultura, arte y gastronomía. 

Como Logroño está tan bien comunicado, empleamos casi un día para llegar a Palermo, donde permanecimos dos noches además de la de regreso, y esto nos permitió conocer el arte que los normandos dejaron en la ciudad, así como los famosos oratorios. 

En días posteriores admiramos los restos de las otras civilizaciones que tomaron posesión de la isla: Templo griego en Segesta, Agrigento y su valle de los templos, los mosaicos romanos de Villa Casale, la zona arqueológica de Siracusa y el barroco de Noto y Catania. 

Y terminamos el viaje volviendo a Palermo, pero admirando el estrecho de Messina y la preciosa Cefalú, donde alguno de nuestros compañeros se lavaron la ropa en los lavaderos medievales. 

En otro ámbito, catamos la pasta en sus múltiples variedades, acompañadas de vinos blancos típicos de la zona, subimos al Etna a asar unas chuletillas, descubrimos que los jóvenes de Catania tienen botellón como los de aquí, aunque ellos lo hacen junto al Teatro Bellini y nos sentamos en el mismo palco del Teatro Máximo donde se sentaba Don Corleone. 

Texto: César Andreu 

Fotografías: César Andreu

(Muchas gracias, César)

VIAJE POR ANDALUCÍA. MÓDULO III

Casi a la vez que ADEX y con el recuerdo reciente de la estupenda fiesta que organizaron para la Universidad de la Experiencia, unos cuantos compañeros del módulo III también se fueron de viaje de fin de curso  y realizaron un recorrido inolvidable de seis días por tres bonitas capitales andaluzas: Córdoba, Granada y Sevilla.   

Visitaron en primer lugar Córdoba, la ciudad que según algunos testimonios hacia el siglo X era la ciudad más grande, culta y opulenta de todo el mundo. Recorrieron la Mezquita, el monumento más importante de Córdoba y el más emblemático del arte Omeya hispanomusulmán. Declarada como Bien de interés cultural y Patrimonio Cultural de la Humanidad, en 2007 se incluyó por el público entre los 12 Tesoros de España. Pasearon también por la Judería, como se conoce el barrio en el que vivían los judíos entre los siglos X y XV, donde se pueden ver monumentos como la Sinagoga y el Zoco municipal. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994.

Su siguiente destino fue Granada. Recorrieron la Alhambra, conjunto de palacios, jardines y fortaleza que servía como alojamiento al monarca y a la corte del Reino nazarí. Visitaron la Catedral Metropolitana de la Encarnación, una de las obras cumbres del Renacimiento español, y pasearon por el Albaicín (o Albaycín), antiguo barrio árabe de la ciudad y uno de los lugares más representativos de Granada, que tuvo su mayor influencia en la época de los nazaríes y que mantiene su trama urbana, calles estrechas con una intrincada red que se extiende desde la parte más alta hasta el curso del río Darro. Allí cenaron disfrutando de unas vistas extraordinarias y de su gastronomía.







Y por último, llegaron a Sevilla, capital de la provincia homónima y de la Comunidad Autónoma de Andalucía. Y allí, como no podía ser de otra manera, visitaron la Catedral, de estilo gótico tardío y construida sobre el solar de la antigua Mezquita Aljama, y todo su conjunto monumental, formado por la Giralda, el Patio de los Naranjos (espacio rectangular que actúa como claustro de la catedral, y la Capilla Real. Pasearon también por el Parque de María Luisa, verdadero pulmón verde de la ciudad, que se llama así porque fue donado por la infanta María Luisa Fernanda de Borbón. Allí está integrada la Plaza de España, que se construyó para la Exposición Iberoamericana de 1929. Por ultimo, un paseo en calesa por los lugares más típicos de esta preciosa ciudad.  


Texto: basado en el relato de Silvio Rodríguez
Fotografías: enviadas por Silvio Rodríguez
(Muchas gracias, Silvio)

LV CLUB DE LECTURA ADEX

José Antonio González, coordinador del Club de lectura de ADEX, además de agradecer la presencia de los amantes de la lectura en el Club del pasado 3 de junio, nos informa de que los libros propuestos para el próximo Club de lectura, que será el día 30 de septiembre, pasadas ya las vacaciones de verano, son: "Rinconete y Cortadillo" y "El coloquio de los perros", dos de las Novelas ejemplares escritas por Don Miguel de Cervantes Saavedra. 

Y nos explica también que se han elegido estos libros como pequeño homenaje a este autor, máxima figura de la literatura española y universal, conocido por el sobrenombre de "Príncipe de los Ingenios", al cumplirse este año el cuarto centenario de su muerte. 

En Santos Ochoa disponen de un libro que contiene los dos títulos, además de otros, al precio de 8 €

En el cartel adjunto tenéis todos los detalles


Novelas ejemplares

ASÍ FUE EL VIAJE A BERLÍN

“Verde y agua”. Así nos describió Andrés, nuestro guía argentino en Berlín, esta preciosa ciudad. Y es cierto: con sus dos ríos, el Spree que la recorre y cruza, y el  Havel  que recoge las aguas de los lagos que conecta alrededor de Postdam, Berlín está rodeada de agua y de inmensos parques que en su día fueron los cotos de caza de las familias reinantes. Berlín es igual a naturaleza. En la ciudad hay más de 2500 zonas verdes abiertas al público y casi una quinta parte de la zona urbana es bosque. Ya sea dando un paseo por sus parques inmensos, o deambulando por sus rincones floridos, seguro que olvidarás que te encuentras en una urbe de más tres millones y medio de habitantes.

Berlín es verde y es historia. A lo largo de los bulevares se pueden imaginar los ecos de los ágiles pasos de las tropas prusianas formadas por hombres que debían medir al menos 1,90 y hablar francés, idioma en el que prefería hablar el príncipe elector Federico I de Prusia, que la creó en 1675, y que fue su primer comandante.

Pero hablando de historia más reciente, recorremos un escenario en el que hace unos 70 años se decidió la suerte de Europa y en el que durante la guerra fría se cruzaron mil historias de espías de uno y otro lado del ya desaparecido “telón de acero”. Uno visita la Puerta de Brandenburgo, los restos del muro infame que separó familias y destinos, la parte de la antigua República Democrática, el famoso “Check Point Charlie”, y le parece estar viviendo una de aquellas oscuras películas que se desarrollaron en sus calles y plazas. O en sus puentes, como el famoso Glienicke, usado por los americanos y los rusos para el intercambio de espías capturados durante la Guerra fría.

Berlín es también sus magníficos museos, como el de Pérgamo y el Egipcio, donde la plácida belleza de Nefertiti, un rostro que podía ser de hoy mismo, nos dejó absolutamente embelesados. También admiramos las bellezas de  Babilonia: la Puerta de Isthar, la Vía procesional, un modelo de la torre de Babel y una copia del código de Hammurabi.

Impresiona recorrer el trozo del Muro pintado por diversos artistas y que forma la “East Side Gallery”. Destaca el famoso beso de Breznev y Honecker y la imagen del Trabant, coche típico que en la Alemania Oriental usaban los miembros del partido estatal.

Por último, quiero destacar nuestra visita a Potsdam, ciudad cuyo nombre significa “bajo los robles”. Después de la Guerra de los Treinta Años (1618-1648), Potsdam había perdido casi la mitad de la población pero su fortuna cambió radicalmente cuando fue elegida en 1660 como residencia de caza de Federico Guillermo I, elector de Brandeburgo, el núcleo del poderoso Estado que más tarde se convertiría en el Reino de Prusia. Los majestuosos edificios de las residencias reales, como el Palacio de Sans Souci («sin preocupaciones» en francés), se construyeron principalmente durante el reinado de Federico el Grande. 

Berlín fue la capital oficial de Prusia y más tarde del Imperio Alemán, pero la corte permaneció en Potsdam hasta el final de la Primera Guerra Mundial, cuando la ciudad perdió su estatus de «segunda capital» de Alemania al abdicar el emperador Guillermo II. Fue precisamente en esta ciudad donde del  17 de julio al 2 de agosto de 1945 se celebró la conferencia de Potsdam en el Palacio Cecilienhof de la ciudad. Los victoriosos líderes aliados Harry S. Truman, Winston Churchill, y su sucesor Clement Attlee, así como Stalin, se reunieron para decidir el futuro de Alemania y la Europa de posguerra en general. Estados Unidos y la URSS tuvieron notables enfrentamientos por el control de Berlín. Por esto se dividió la capital alemana en cuatro sectores. La conferencia acabó con el Acuerdo de Potsdam y la Declaración de Potsdam.

De vuelta a Berlín y dentro de los jardines del Tiergarten (“Jardín de los animales”), antiguo coto de caza y que ocupa 210 hectáreas, están los monumentos conmemorativos en recuerdo a los homosexuales y gitanos exterminados durante la dominación nazi, y muy cerca, ocupando una gran plaza,  está el monumento al holocausto judío.

Añadamos a todo esto innumerables plazas y avenidas, paseos por el río, bulliciosas salchicherías, risas y confidencias con nuestros compañeros de viaje y os haréis idea de que todos hemos vuelto con un magnífico recuerdo de la ciudad y un espíritu de camaradería que tardará en abandonarnos. Gracias a todos y hasta la próxima singladura, amigos.

Texto: Julia Baigorri

Fotografías: Julia Baigorri y Julián Barrado 

Damos las gracias en primer lugar a ADEX, que propuso este viaje. A Outlet Logroño y en especial a Roberto, por su magnífica organización  y su constante supervisión para que todo saliera según lo previsto; a Andrés, que nos guió por Berlín, por sus monumentos, por su pasado y por su presente, y nos dió las claves para amar esta ciudad; a Juan, con el que entramos triunfantes en Babilonia, y que más tarde nos condujo hasta Nefertiti, la mujer más bella que hayamos visto jamás. Y gracias también a todos los viajeros por el buen ambiente, la camaradería y la amistad que reinaron en todo momento en el viaje, y que es lo que realmente lo ha hecho inolvidable. 

  

LIV SESIÓN DEL CLUB DE LECTURA

Cuando el pasado viernes 3 de junio, nos reuníamos para disfrutar una vez más de una nueva sesión de nuestro club de lectura, Gemma, nuestra generosa anfitriona, nos sorprendía gratamente con la noticia de que el bebé que con tanta ilusión y anhelo estaban esperando había nacido ya, hacía tan sólo unos días. 

Ni que decir tiene que cada uno de nosotros le expresamos nuestra felicitación y nuestros mejores deseos, y en nombre del grupo le entregamos el regalo que, con las aportaciones de todos los participantes en el club,  habíamos adquirido para la ocasión. También le obsequiamos con el estuche de vino que ADEX patrocina como todos los años.

A continuación iniciamos la puesta en común del libro correspondiente. En este caso se trataba de: “Relatos de lo inesperado”, del británico  Roald Dahl. La opinión fue que todos habíamos disfrutado con su lectura.

El libro en cuestión está compuesto por 16 relatos cortos, cada  cual más intrigante que el anterior, y con un final no menos sorprendente. Unas historias que, con su fino humor negro en unas ocasiones, con ironía, sarcasmo, y hasta con una cierta melancolía en otras, hace un recorrido por la maldad y  las miserias de las personas.

Para ello, nos introduce en escenarios de distintas facetas de la vida: el juego, las apuestas, la avaricia, la venganza, los rencores y la perversidad humanas. Psicópatas, que al principio no se sabe que lo son, y multitud de circunstancias que hacen que su lectura resulte una experiencia formidable; tanto que nos hemos propuesto algún otro título del mismo autor para una próxima lectura.

Texto: José Antonio González

Fotografías: Marisa Montalvo